lunes, 19 de octubre de 2015

​¡Dios lo sabe!

Quien tiene a Dios ya es rico, es pleno, tiene paz, tiene gozo, tiene fe, tiene propósito, tiene vida, tiene recursos, tiene el cielo y no tiene por qué preocuparse. Él es la fuente de toda bendición en el cielo y la tierra. Dios sabe de antemano de qué tenemos necesidad, no obstante, quiere que le pidamos, que estemos conscientes si en verdad queremos sus bendiciones y el compromiso que conlleva administrarlas; Dios quiere que reconozcamos la dependencia que tenemos de Él y anhela que entendamos que sólo necesitamos una fe enfocada. ¡Puede no ser una gran fe, pudiera ser tal como un granito de mostaza, pero siempre apuntando al gran Dios que tenemos! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario